Te veo. Comprendes? En mis palabras puedo verte, sentirte, apenas rozarte con la yema de mis dedos, y tal vez, cuando tengo suerte tus aromas llegan hasta mis sentidos y entrecierro los ojos mientras respiro tu esencia y una lagrima acaricia mis pupilas.
Entonces resuelvo al fin, el interminable momento de dichas que he pasado, pero siento que cada momento que he vivido a sido un ladrillo para formar el castillo que luego quedara listo cuando me invites a pasear simplemente con estar presente en el mismo salón que yo, y ahí sabre que mi castillo a llegado a su fin de construcción para vivir dentro de el, tal vez juntos, tal vez vos, tal vez yo o nosotros en un instante tan íntimo y eterno como el viaje de una gota de lluvia desde el más infinito cielo hasta caer en tu nariz mientras miras el paisaje azul y me cubres con tus manos, para no empaparme demasiado, o tal vez, porque simplemente, quieres abrazarme.
Y yo me dejo, porque no hay mejor castillo ni refugio que tus brazos.
By: Micaela