martes, 26 de marzo de 2013

Diario de la lejana (28)

A veces no me doy cuenta y sueño. Mirando un punto blanco en la pared que me acobija en mi habitación, suspiro. Sueño que brazos invisibles me abrazan y trato de entender de quienes son, no lo se. Sin embargo no existen mas que en mi imaginación.
La lejana lo sabe, pero no me dice nada, deja que siga soñando hundida de besos invisibles en una respiración suave que me recorre el cuello. 
A veces no me doy cuenta y sueño. Me visualizo como una simple chica con un bonito vestido sentada en medio de un gran campo infinito. Con colores que se cuelan por entre mis huesos y me hacen bailar conforme el viento me envuelve en estelas lumínicas a penas visibles. 
Allí aparecen brazos fuertes, seguros. Tengo miedo de despertar, tengo miedo de fallar
La lejana lo sabe, pero no dice nada.
Me acabo de dar cuenta. Si. Tengo miedo de fallar en el amor. Por eso siempre son brazos invisibles los que me abrazan y no puedo conseguir sentir el abrazo cálido una mañana de otoño. 
La lejana sabe que el miedo paraliza, sabe que es algo pasajero, como un tren veloz que me recorre y se va. Pero la lejana sigue sin decírmelo. 
Nunca lo comprendí hasta ahora. Tengo miedo de hacer mal mi parte. De ser pasional y romántica como soy. De ser entera y eterna como soy. De ser entrega y devoción a alguien. 
La lejana llora de emoción sabe que al escribirlo me libero inmediatamente de cadenas oxidadas. Me dice: mira, la que aconseja de amor. Tiene miedo de amar. 

Pobre. La lejana se apiada de mi y mientras la miro confusa y enojada le reprocho: como es que jamas me lo dijiste si sabias?

Tal vez tengo miedo de entregar mi corazón.  La lejana se ríe y me confiesa: cuando el amor toque a tu puerta no podrás negarte, porque será tan indicado que tu corazón olvidara cualquier prejuicio. 
La miro, y siento que cada día me sorprende mas. Es tan experta en mi que no puedo superarla. No quiero hacerlo. Quiero que la lejana me guié  Quiero superar los miedos, inútiles cadenas que acorralan almas libres. 

Lejana- le digo- te quiero.
Te quiero- me confiesa- Deja de ser tan tonta. 

By: Nuné
(el arte es un estado del alma)